Pasos procesionales

PASOS PROCESIONALES

Propiedad de la Hermandad

LA ENTRADA DE JESÚS EN JERUSALÉN

Cedido en usufructo a la Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén desde su fundación.

Es un grupo de nueve figuras de tamaño natural. Realizado por los hermanos José y Joaquín Albareda en 1940, que sustituyó al paso anterior, obra de Antonio Palao Marco y construido en 1863. Este paso quedó destruido en un incendio ocurrido durante la noche del 9 de abril de 1935, un atentado perpetrado en el antiguo garaje de pasos de la calle Monreal.

Fue bendecido en el año 1940.

Paso de La Entrada de Jesús en Jerusalén
Hnos. Albareda 1940

EL CENÁCULO

Representa a Cristo acompañado de sus discípulos en el momento de la última cena.

Realizado en madera policromada por Luis y Vicente Muñoz en 1827.

Actualmente solo procesiona, el día del Viernes Santo acompañado por la Cofradía de la Institución de la Sagrada Eucaristía.

Paso tallado por Luis Muñoz y su hijo Vicente, en el año 1.827.

En 1.946, se sustituye la imagen de Jesús sentado, en actitud de cenar, por otra de pie, con una mano alzada, en actitud de bendecir el cáliz que colocan, delante de la imagen, en la mesa.

El Cenaculo, Luis y Vicente Muñoz 1827

El Cenaculo Luis y Vicente Muñoz

ORACIÓN EN EL HUERTO

Cedido en usufructo a la Cofradía de Nuestro Señor en la Oración del Huerto desde su fundación.

Es obra del escultor valenciano Francisco Borja en 1913.

Recoge el momento de la Oración de Jesús en el Huerto de los Olivos, de rodillas, con las manos entrecruzadas, mirando al cielo, con un expresivo rostro lleno de dolor, cuando es confortado por el ángel que le ofrece el cáliz de la amargura. Cerca de la figura de Jesús están las de los tres apóstoles que le habían acompañado, Pedro, Juan y Santiago, durmiendo plácidamente.

Paso de La Oración en el Huerto, Francisco Borja

EL BESO DE JUDAS

Cedido en usufructo a la Cofradía del Prendimiento del Señor y el Dolor de la Madre de Dios.

Realizado por José Alegre en 1847.

Se compone de ocho figuras de tamaño natural, recoge el momento del beso de Judas y el temor de Malco cuando Pedro le ha cortado una oreja, rodeadas estas imágenes por soldados en diversas actitudes. Las imágenes, realizadas a tamaño natural sobre madera, destacándose entre todas ellas, por su elegancia de formas, la de Cristo, vestido con amplia túnica y manto a la manera hebrea. También es muy interesante la imagen de Pedro, que escucha las palabras de Cristo, bajando el brazo que sostiene la espada con la que ha cortado la oreja a Malco, quien yace en el suelo en una actitud muy forzada El Paso fue esculpido por el artífice bilbilitano José Alegre y estaba concluido en el año 1847.

Paso del Beso de Judas, José Alegre 1847

JESÚS ATADO A LA COLUMNA

No procesiona a día de hoy.

Realizada por Tomás Llovet en 1818.

Esta imagen fue sufragada junto a las del Ecce-Homo y Jesús camino del Calvario, con los beneficios de las novilladas que fueron realizadas en el 1817, con la  autorización del rey Fernando VII a beneficio de la Hermandad de la Sangre de Cristo.

Ver documentacion de la epoca

La imagen se encuentra en la capilla del Santo Sepulcro en la Real Capilla de Santa Isabel de Portugal, vulgo San Cayetano.

Procesionó con la  Real, Pontificia, Antiquísima, Ilustre, Franciscana y Penitencial Hermandad y Cofradía del Señor Atado a la Columna y de Ntra. Sra. de la Fraternidad en el Mayor Dolor, desde 1941 hasta 1967.

Jesús Atado a la Columna, Tomás Llovet 1818. Fotografía: Jorge Sesé.

CORONACIÓN DE ESPINAS

Cedido en usufructo a la Cofradía de la Coronacion de Espinas.

Realizado por Francisco de Borja en 1905.

Sus imágenes fueron talladas en el taller del escultor valenciano Francisco de Borja.
Cuatro son las figuras que lo componen. La escena central de la coronación cargada de una gran expresividad está compuesta por la imagen de Cristo, maniatado y recibiendo la cruel burla y por el centurión que le corona. Destaca el rostro de Cristo, con la mirada dirigida al Padre, que transmite a quien lo contempla sentimientos de resignación y perdón más que de dolor, sensaciones acentuadas ante el rictus sádico y cruel del romano que le clava la corona ayudado de unas tenazas. El soldado con lanza que contempla la escena con gesto burlón y el sayón que increpa a Nuestro Señor son los personajes secundarios que completan la escena.

Paso Coronación de Espinas,
Francisco de Borja 1905

ECCE HOMO

La imagen no procesiona a día de hoy.

Realizada por Tomás Llovet en 1818.

La imagen se encuentra en la capilla del Santo Sepulcro en la Real Capilla de Santa Isabel de Portugal, vulgo San Cayetano.

Procesionó con la Cofradía del Santísimo Ecce-Homo y Nuestra Señora de las Angustias, siendo la Imagen titular de dicha cofradía desde 1948 hasta 1967

Volvío a procesionar la imagen del Ecce Homo de Llovet el Miércoles Santo de 2016,   para conmemorar la Cofradía del Santísimo Ecce Homo y de Nuestra Señora de las Angustias: los 50 de su primera salida procesional con el Ecce Homo de la parroquia de San Felipe.

Ecce Homo, Tomás Llovet 1818. Fotografía: Jorge Sesé.

JESÚS CON LA CRUZ A CUESTAS

Cedido en usufructo a la Cofradía de Jesus Camino del Calvario.

De las cinco figuras que originalmente constaba el paso, (obras de Pedro León y Matias Ayerdi) actualmente solo figura Jesús con la Cruz a Cuestas.

Realizado por Tomás Llovet en 1818.

Tallada en madera de pino. La imagen, de complexión ligeramente atlética, muestra a Jesús en el momento de cargar con la cruz sobre el hombro izquierdo. De ahí que su cuerpo se incline hacia delante mostrando sus hombros una evidente curvatura.

LA CAÍDA

Cedido en usufructo a la Cofradía de Jesus Camino del Calvario.

Donado a la Hermandad por doña Romana Mercier Landaida.

Realizado en los talleres Castellanas de Olot (Gerona) en 1941.

Se encargó el paso a los talleres de imagineros “Castellanas, Serra i Casadevall” de Olot (Gerona), empleándose moldes del escultor barcelonés Miquel Castellanas, que reproducían la escena central del Pasmo de Sicilia.
En primer término aparece un sayón tirando de una soga que Jesús caído lleva atada a la cintura, cuando es ayudado por Simón de Cirene que le coge la cruz por detrás, mientras un soldado romano presta atención a la situación con el pilum en prevengan. Otro romano detrás del Cireneo con el brazo extendido señala en dirección de la marcha con el pilum al hombro. Jesús girado, mira hacia el grupo de tres mujeres, entre las que se encuentra la Verónica que, arrodillada junto a Él, tiende los brazos con el paño; la Virgen María de pie muestra su dolor y María Magdalena, también de rodillas, lanza sus brazos en socorro de Jesús caída.

La Caída

LLEGADA DE JESÚS AL CALVARIO

Cedido en usufructo a la Cofradía de Nuestra Señora de la Asunción y llegada de Jesús al Calvario.

Realizada por Tomás Llovet 1828.

Conocido popularmente como el de “La Copa”, representa a Jesús en su llegada al Calvario y dos soldados despojándole de sus vestiduras mientras que otro le ofrece un vaso que contiene hiel y vinagre.

Obra del escultor alcañizano Tomás Llovet. En el año 1860 constaba de seis imágenes y, con posterioridad, en 1910, solo contaba con cuatro, desconociéndose el momento en el que fueron suprimidas las dos restantes que lo completaría.

Llegada de Jesús al Calvario, Tomás Llovet 1828

EL CALVARIO

Cedido en usufructo a la Cofradía de la Crucifixión del Señor y de la Venerable Orden Tercera de San Francisco de Asís.

Realizado por José Alegre en 1841.

Se trata de un magnífico conjunto, para cuya composición, el escultor Alegre pudo inspirarse en una pintura de Pedro Pablo Rubens, del mismo asunto, que se conserva en el Museo Real de Amberes. De notable aspecto, se representa el monte Calvario, sobre el que se disponen tres grandes cruces. En la del centro está la imagen de Jesucristo, de tamaño natural, como el resto de las figuras, y en ambos lados, otras dos cruces con los dos ladrones. Bajo la cruz de Cristo, de pie, se encuentran las imágenes de la Virgen María y de san Juan, una a cada lado, y frente a ellos, cerrando el conjunto por delante, la figura de Longinos, sobre un caballo blanco, en el momento de dar la lanzada a Cristo.

El Calvario, José Alegre 1841

EL DESCENDIMIENTO

Cedido en usufructo a la Cofradía del Descendimiento de la Cruz y Lágrimas de Nuestra Señora.

Se compone de siete figuras en las que se plasma el acto del Descendimiento de Cristo. Está inspirado en el cuadro que realizó el pintor Pedro Pablo Rubens para la Catedral de Amberes.

Realizado por José Alegre en 1847.

La escenificación del paso es de gran monumentalidad y complicada composición, donde unas figuras van unidas a otras, formando con la cruz -eje central- y las escaleras un conjunto piramidal. En este conjunto se pueden diferenciar claramente dos grupos.

El primer grupo de figuras unidas a la Cruz representan en lo más alto un joven, que podría ser Longinos -según los evangelios apócrifos-, sobre el otro brazo de la Cruz se situaría José de Arimatea, Cristo en el centro de la escena, y sujetándolo desde abajo Nicodemo y San Juan.

El segundo grupo de figuras que asisten a la escena, está formado por la Virgen en actitud iconográfica de “Mater Dolorosa” y María Magdalena.

El Descendimiento, José Alegre 1847

VIRGEN DE LA PIEDAD

Cedida en usufructo a la Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad y del Santo Sepulcro.

Donado a la Hermandad por Dña. Ana Falcón.

Realizado por Antonio José Palao y Marco en 1871.

La imagen de la Virgen de la Piedad es obra del escultor murciano Antonio José Palao Marco y fue realizada por encargo de doña Ana Falcón Bravo de Almech quién, con fecha de 18 de octubre de 1870, comunicaba a la Hermandad que había encargado al escultor Antonio Palao la talla de la imagen de La Soledad, en la que se representaba a la Madre de Dios al pie de la Cruz con su Hijo en los brazos después del Descendimiento.
Aparece la Virgen sentada sobre un peñasco, revestida con rica túnica ceñida en la cintura y amplia capa, con capucha que también cubre su cabeza elevada, con sus ojos llorosos –con un sereno dolor– clavados en el cielo, implorantes. Sus manos se abren vacías, impotentes. El cuerpo de Cristo aparece sentado en tierra, apoyando su cabeza yerta sobre la rodilla derecha de la Virgen y manteniendo los brazos caídos. Su cuerpo desnudo tan sólo aparece cubierto por el paño de castidad.

NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES

Realizado por Antonio José Palao y Marco en 1856.

Realizada en madera policromada. Se presenta ante nosotros una talla de cuerpo entero, para vestir y de tamaño natural.

Desde  2015 preside el retablo de la sacristía de la nave de la epístola, en la Real capilla de Santa Isabel de Portugal.

Nuestra Señora de los Dolores, Antonio Palao 1856

Instituida en noviembre de 1.937 la Hermandad de San Joaquín y de la Virgen de los Dolores como cofradía penitencial, le fue encomendada por la Sangre de Cristo esta imagen como titular, posesionándola hasta 1949 cuando fue estrenada una nueva imagen obra del escultor granadino afincado en Zaragoza Manuel Jose Calero Arquellada.

Fue costeada por el matrimonio de don Victoriano Zapatero y doña Ascensión Gargallo, al celebrar sus bodas de plata matrimoniales. Destaca de esta imagen, de vestir, su rostro, lleno de dolor y amargura, que recuerda a las imágenes dolorosas andaluzas, lógica trasposición de la tierra de origen del escultor.

La imagen de la Virgen de los Dolores recibe culto en la capilla de Hermandad de la Sangre de Cristo en la iglesia de Santa Isabel, (vulgo San Cayetano) en una hornacina situada en la Capilla del Santo Sepulcro.

Cedida en usufructo a la Hermandad de San Joaquín y de la Virgen de los Dolores.

Nuestra Señora de los Dolores, José Calero 1949

SANTÍSIMO CRISTO DE LA CAMA Y CARROZA DEL SANTO SEPULCRO

La imagen del Santísimo Cristo de la Cama está datada a finales del siglo XV y de autor anónimo.

Imagen titular de la Hermandad de la Sangre Cristo

Es una talla de cuerpo completo de Cristo muerto, tallada en madera, articulada en ambos brazos y de poco peso, en la que destaca el estudio del rostro, alargado, bello y expresivo, con peluca de pelo natural, con la que se escenificó hasta 1834 la ceremonia del Abajamiento de la Cruz.

La cama, realizada por Antonio Palao en 1855, se eleva sobre un basamento de madera en cuyos ángulos aparecen los símbolos de los cuatro Evangelistas: el águila y el ángel en la parte frontal y el león y el toro en la parte posterior. La cama propiamente dicha, al igual que el resto de los accesorios que la completan, está labrada en madera, dorada y policromada.

La parte frontal se decora con el emblema de la Hermandad de la Sangre de Cristo..

Escudo Hermandad

Detalles Cama

Sobre la cabecera de la cama están colocadas las figuras de dos ángeles mancebos, vestidos con túnica, en actitud de coronar a Cristo con una corona imperial que sustituyó en 1942 a la primitiva, de la que pendía una guirnalda de flores. Entre éstos destaca un resplandor de metal en cuyo interior pende la medalla de oro del Centenario de los Sitios.

La imagen de Cristo apoya la cabeza en una almohada, y es cubierto por una sábana y una colcha bordadas con hilo de oro en 1858 en los talleres de Vicente Cormano.

Colcha bordada en los talleres de Vicente Cormano. 1858

Es la imagen titular de la Hermandad de la Sangre Cristo, es portada solemnemente por las calles zaragozanas en la actual Procesión del Santo Entierro  que tiene lugar en la tarde noche del Viernes Santo, por una sección específica denominada «De Cama del Señor«, y que se distingue fácilmente a sus componentes por llevar la cara tapada.

Paso del Cristo de la Cama

PASO DEL TRIUNFO DE LA VIDA SOBRE LA MUERTE

No procesiona a día de hoy.

Imagen que abría la procesión del Santo Entierro desde sus orígenes. La talla es de autor anónimo y fue adquirida en 1818 en la localidad de Amposta (Tarragona).

Paso del triunfo de la vida sobre la muerte, Anónimo 1818. Fotografía: Jorge Sesé.

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